— Subaru Sumeragi —

Su historia.

El clan Sumeragi es un familia de ya varios siglos de existencia, desde sus inicios este clan se ha destacado por que sus miembros y descendencia siempre han resultados ser poderosos médiums o sacerdotes que velan por el bienestar de Japón, ya sea purificando edificios, exorcizando los mismos o realizando rituales que protejan a algún miembro importante del gobierno.  No obstante con el pasar de los años y el cambio en la sociedad,  el clan pese a su riqueza y posición, fue menguando en cuanto a miembros ya que muchos de ellos optaban por trabajos o especialidades que no se relacionaban con las artes espirituales del clan. Pronto se vieron en el predicamento de que las generaciones nuevas eran de solo tres o un descendientes y entre ellos debía elegirse al líder de todo el clan.

Subaru  nació en Kioto al igual que su hermana gemela Hokuto, ambos gemelos presentaron habilidades espirituales pero el joven Subaru opaco por mucho a su hermana, ello volviendo casi de manera inmediata en el candidato a próximo líder del clan. Por aquella decisión unánime, el joven Sumeragi se vio educado desde su infancia para volverse no solo el líder del clan, si no en un exorcista de primera calidad, ello siendo alejado de la sociedad cambiante y manteniéndolo en una mansión del clan en las montañas, su hermana gemela acompañándole en todo momento y aquello formando un lazo por demás estrecho entre ambos, en especial siendo que Hokuto era la gemela más extrovertida y excéntrica- mientras que Subaru era más introvertido y tímido.

Durante esos años de ardua preparación, Subaru llego a acompañar a su abuela –actual líder del clan- a diversos ritos y purificaciones, en aquellos momentos, logrando observar las ciudades y su ajetreado modo de vida. Fue en una de aquellas ocasiones, que Subaru se alejó del lugar del ritual que realizaba su abuela, sintiendo que alguien le llamaba. Para resumir los acontecimientos, el clan Sumergai al ser tan poderoso y con tanta reputación, se había hecho de rivales con el pasar de los años, uno de los clanes rivales siendo los Sakurazukamori, un clan que también utilizaba rituales espiritistas pero estos de naturaleza más oscura., Subaru al alejarse de su abuela y en su ingenuidad infantil, se topó con uno de los miembros de dicho clan y fue marcado por el mismo como futura presa, el suceso fue borrado de la memoria del niño y su abuela tomo medidas para protegerle de aquel clan asesino.

A sus quince años, Subaru y Hokuto pasaron a mudarse a Tokyo, donde se establecieron y comenzaron a realizar trabajos del clan. Durante su estadía en la ciudad, conocieron a un hombre mayor de nombre Seishiro, el cual se ejercía como veterinario y rápidamente formo una amistad con los gemelos, no ocultando o más bien siendo exageradamente directo en cuanto a sentimientos románticos dirigidos a Subaru. Tomando dichas confesiones de amor como bromas o juegos,  el Sumeragi continúo trabajando y rápidamente cumplió un año de llegar a Tokyo y conocer a Seishiro. No acostumbrado ni con experiencia sobre relaciones o el “amor” de pareja, se requirió de un suceso trágico para que Subaru se diese cuenta de que tenía fuertes sentimientos hacia Seishiro; desgraciadamente, al momento en el que el chico estaba por finalmente abrirse hacia alguien y ver cumplido su ‘primer amor’ fue que Seishiro revelo ser miembro de los Sakurazukamori y en ese mismo instante, intentar asesinar a Subaru, ya que era él quien le había marcado como presa. El hecho de saber eso y que el hombre le había engañado durante todo un año, sumado al hecho de que Subaru había terminado enamorándose fue duro, estuvo a meros segundos de morir a manos del Sakurazukamori siendo salvado por la intervención de su abuela.

No obstante, pese a seguir con vida, Subaru quedo en un estado catatónico debido a la depresión, decepción y el hecho de haber terminado con el corazón roto. Hokuto estuvo a su lado pero con el pasar del tiempo decidió tomar acciones y tomando las ropas ceremoniales de Subaru fue en busca del Sakurazukamori para hacerle frente. Aun si Hokuto no poseía el poder de su hermano, podía aun así formar conjuros y maldiciones; logro colocar una en Seishiro y con ello pago con su vida. Al saber de la muerte de Hokuto, Subaru salió de su estado catatónico y aun pese a la soledad a la que se vio condenado, se enfocó en volverse más fuerte y llegar a hacer frente a Seishiro, cambiando por completo su personalidad ingenua e idealista por una más fría.

Varios años después ambos volvieron a verse frente a frente y entraron en conflicto, fue una pelea sin cuartel y aun pese a que ambos tenían un poder equitativo, en un momento de la pelea Subaru simplemente se resignó a dejarse asesinar por Seishiro. En cuando el otro hizo el encantamiento, la maldición de Hokuto entro en efecto y el Sakurazukamori murió aun siendo consciente de que ese sería el resultado. La escena y las últimas palabras de Seishiro hacia Subaru perturbaron al muchacho, que si bien había estado dispuesto a acabar con su vida a manos del hombre que alguna vez amo, este nuevamente le arrebato lo único que llego a desear o amar.

Con su confianza en los demás mermada y las cicatrices emocionales de tantas experiencias sufridas por la crueldad de un solo hombre, Subaru tomo sus cosas y se marchó de Tokyo, viajando sin rumbo alguno hasta toparse con Aramise, donde decidió establecerse por algún tiempo. Aún pese a todo, sigue fungiendo como futuro líder del clan y realizando trabajos para el mismo, más esto lo hace por mera costumbre ya que no tiene una meta o ambición real y tampoco piensa continuar con el Clan Sumeragi. Básicamente, ahora busca alguna razón para al cual continuar viviendo sin caer en una espiral depresiva y poder superar su pasado.